Esta norma propone dos ejes fundamentales en materia de inclusión: por un lado, la capacitación de agentes y funcionarios/as públicos/as en trato adecuado a las personas con discapacidad desde un paradigma de derechos humanos y desde los principios de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. Y por el otro, promueve acciones concretas de accesibilidad cognitiva en espacios de uso y dominio público.
Esta adhesión constituye un paso más en el reconocimiento de las personas con discapacidad como sujetos de derechos e invita a seguir generando políticas públicas donde la discapacidad sea un eje transversal.
Estamos trabajando por una Ciudad que nos incluya a todas y a todos.